En los últimos años, todas las compañías del país se han enfrentado a los cambios normativos que se vienen presentando y a las nuevas medidas que solicitan las superintendencias, así como también a situaciones externas que han llevado a parar la operación de muchas empresas en el país. A la luz de esta situación, algunas personas se preguntan si esto si sirve, si es una carga adicional y si tiene alguna funcionalidad. 

Lo primero que debemos entender es que la gestión de riesgos en las compañías son las acciones tomadas para la identificación, evaluación y mitigación de riesgos en un proceso, con las que se pueda garantizar la continuidad del negocio. Recordemos lo vivido en nuestras compañías cuando llegó la pandemia, pues muchas empresas colombianas no estaban preparadas para continuar con sus labores por fuera de las instalaciones. 

En ese momento, todas las empresas se vieron obligadas a buscar planes de continuidad del negocio y ponerlos en marcha, bajo la gravedad de que si fallaban debían buscar que los servicios continuaran y seguir con prueba y error.

Pero, ¿cómo hubiese sido si las compañías dentro de sus riesgos identificados se hubieran planteado la posibilidad que esto pasara o que por algún motivo los servicios se prestaran  por fuera de la oficina? Lo que quedó como evidencia es que las compañías no estaban listas para llevar y atender sus servicios desde otros puntos, la falta de equipos y de lugares para trabajar sólo demostraron que la gestión de riesgo en las compañías son pocas y los planes de continuidad del negocio muchas veces no son parte de los procesos a identificar y corregir antes de las emergencias.

Uno de los resultados que se evidenciaron fueron valores altos que pagaron las compañías por los inmuebles que se vieron obligados a adquirir, además, cuando las compañías no realizaron la compra adecuada de los implementos, se les materializaron otros tipos de riesgos y se expusieron a problemas mentales y físicos informados ante las ARL y, por si fuera poco, también enfrentaron las pérdidas de negocios, dejando una tasa de desempleo en el 19.8% para el 2020.

En conclusión, y para que a usted no le pase, para la supervivencia y desarrollo de las empresas es necesario tener en cuenta que los riesgos son parte del día a día y se debe garantizar en todos los aspectos que estos se identifiquen y se traten correctamente.